Barreras y facilitadores asociados a los retrasos en el diagnóstico y tratamiento del lupus: perspectivas de pacientes y reumatólogos de la región andina/bolivariana
- Dra. Maria Claudia Diaz

- 16 dic
- 3 Min. de lectura
El lupus eritematoso sistémico es una enfermedad compleja que puede tardar años en ser diagnosticada y tratada correctamente. En países de la región andina y bolivariana, como Colombia, Perú, Ecuador, Bolivia y Venezuela, este proceso suele ser aún más difícil debido a problemas del sistema de salud, barreras sociales y desigualdades económicas. Este artículo analiza, desde la voz de pacientes y reumatólogos, cuáles son las principales razones de estos retrasos y qué factores pueden ayudar a mejorar el acceso oportuno a la atención médica.

Resumen del artículo en 5 puntos clave
1. Falta de disponibilidad de servicios especializados
Uno de los principales problemas identificados es la escasez de reumatólogos, especialmente fuera de las grandes ciudades. Muchos pacientes deben esperar meses para una cita o viajar largas distancias, lo que retrasa el diagnóstico y el inicio del tratamiento.
Además, existen limitaciones en el acceso a exámenes de laboratorio y medicamentos esenciales. En algunos casos, los resultados deben enviarse a otras ciudades o países, aumentando el tiempo de espera y el riesgo de complicaciones.
2. Barreras de acceso social, cultural y económico
El estudio muestra que factores como la pobreza, el aislamiento geográfico y la falta de recursos económicos dificultan que los pacientes busquen atención médica a tiempo. Muchas personas recurren a la automedicación, lo que puede ocultar síntomas importantes y retrasar el diagnóstico.
También influyen creencias culturales, desinformación y estigmas sociales. Algunas personas minimizan sus síntomas por miedo, vergüenza o presión familiar y laboral, lo que retrasa aún más la atención médica adecuada.
3. Problemas de trato, género y sensibilidad cultural
Muchos pacientes, especialmente mujeres, reportaron que sus síntomas fueron desestimados o atribuidos a causas psicológicas. Esto genera desconfianza en el sistema de salud y múltiples consultas sin un diagnóstico claro.
La falta de sensibilidad cultural y de enfoque de género por parte del personal de salud también influye negativamente. Cuando los profesionales no consideran el contexto social, cultural o emocional del paciente, la atención se vuelve menos efectiva y más tardía 172.
4. Baja calidad y fragmentación de la atención médica
El artículo evidencia una mala coordinación entre los diferentes niveles de atención. La atención primaria muchas veces no cuenta con la formación suficiente para reconocer el lupus ni para solicitar los exámenes adecuados.
Además, la excesiva burocracia y los trámites administrativos generan retrasos, duplicación de pruebas y discontinuidad en el seguimiento del paciente. Esto afecta tanto la calidad del diagnóstico como el tratamiento a largo plazo.
5. Desigualdad y migración como factores clave
La desigualdad en los sistemas de salud atraviesa todo el proceso de atención. No todas las personas tienen las mismas oportunidades para acceder a diagnósticos tempranos, tratamientos continuos o medicamentos esenciales.
La migración aparece como una estrategia para buscar atención médica o medicamentos en otros países. Aunque en algunos casos facilita el tratamiento, muchas veces genera nuevas barreras, ya que los migrantes no siempre tienen acceso garantizado a los servicios de salud en el país de destino.
Conclusión
El retraso en el diagnóstico y tratamiento del lupus en la región andina y bolivariana no depende solo de la enfermedad, sino de profundas fallas estructurales, sociales y educativas en los sistemas de salud. Fortalecer la atención primaria, mejorar la formación médica, reducir la burocracia y promover una atención más humana y centrada en el paciente son acciones clave para lograr diagnósticos más oportunos y una mejor calidad de vida para las personas con lupus.
ORIGINAL ARTICLE: Barriers and Facilitators Associated With Delays in the Diagnosis and Treatment of Lupus: Insights From Patients and Rheumatologists From the Andean/Bolivarian Region
Ana Ospina-Caicedo, MD; Yurilis Fuentes-Silva, MD; Kelly Escobar-Jimenez, PhD; Romina Payan-Castillejos, BA; Manuel Ugarte-Gil, MD; Patricia E. Díaz-Cuiza, MD; Sergio Guevara-Pacheco, MD, PhD; Iván Stekman, MD; Amaranta Manrique de Lara, MSc; Ivonne del Cisne Quezada-López, MD; Edgar A. Castro-Franco, PhD; Jesús G. Ballesteros, MD; Irama Maldonado, MD; Gloria Vázquez, MD; Sandra Y. Martinez-Gomez, BA; María del Carmen Ochoa, MD; Carlota Acosta, MD; Jorge H. Izquierdo, MD; Ericka V. Sarabia-Chavez, MD; Nataly Liduvina Beleño-Epieyu, MD; Cecilia Camacho, BA; Luisa Ortega-Latan, MD; Carolina Espinosa-Escobar, MSc; Tirsa Colmenares-Roa, PhD; Danith Medina-Bornachera, MD; Keisy Orduz-Uribe, MD; Alexander Serna-Paz, MD; Jennyffer Vélez-Martínez, MD; Marylin Parra-Martínez, MD; Rómulo Villacís-Tamayo, MD; Susana Lucero Revollo, MD; Juan P. Gómez-Alconz, MD; Rosana Quintana, MD, PhD; Ingris del Pilar Peláez-Ballestas, MD, PhD.






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