Un nuevo avance en esclerodermia: Un análisis de sangre que predice la evolución de la enfermedad
- Doctora Maria Claudia Diaz
- hace 6 días
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Actualizado: hace 2 horas
La esclerodermia, especialmente en su forma más agresiva (la esclerosis sistémica difusa), puede causar complicaciones serias como daño pulmonar, dolor articular y dificultad para llevar una vida normal. Hasta ahora, los médicos contaban con pocos recursos para saber con certeza qué pacientes iban a desarrollar complicaciones graves.

Un reciente estudio internacional publicado en The Lancet Rheumatology en abril de 2025 ha descubierto un nuevo biomarcador en la sangre que permite anticipar qué pacientes tienen más riesgo de evolución severa. Este hallazgo podría ayudar a personalizar los tratamientos y evitar que la enfermedad progrese en quienes tienen mayor riesgo.
1. ¿Qué es el biomarcador de interferón tipo I y por qué importa?
Los investigadores han descubierto que los pacientes con esclerodermia que presentan niveles elevados de ciertas sustancias en su sangre, conocidas como interferones tipo I (IFN-I), tienden a desarrollar formas más graves de la enfermedad. Estas sustancias están relacionadas con la activación excesiva del sistema inmunológico.
Tener una “firma de interferón” alta puede indicar que el sistema inmune está reaccionando de forma desproporcionada y atacando tejidos sanos. Este hallazgo ha permitido desarrollar análisis de sangre simples que detectan este patrón y ayudan a tomar decisiones médicas más precisas desde etapas tempranas.
La huella del interferón es una herramienta que nos permite valorar tanto el fenotipo clínico como inmunológico del paciente, con el objetivo de predecir desenlaces y pronóstico, especialmente en los casos donde hay compromiso sistémico o de órganos vitales como el pulmón.
2. Identificar a tiempo a quienes tienen más riesgo
Uno de los grandes logros de este estudio es que demostró que las personas con niveles altos de IFN-I en sangre ya presentaban problemas pulmonares incluso en etapas tempranas. Esto incluye una función pulmonar más baja y síntomas respiratorios importantes.
Además, estos pacientes también reportaron más dolor articular, fatiga y discapacidad a lo largo del seguimiento. Saber esto desde el inicio permitiría a los médicos actuar rápidamente para prevenir que el daño avance, ajustando los tratamientos según el riesgo de cada paciente.
3. Personalizar tratamientos: el futuro del cuidado en esclerodermia
Este avance puede cambiar la forma en que los médicos abordan la esclerodermia. Si se confirma que una persona tiene una firma IFN-I alta, se podrían iniciar tratamientos más intensivos o incluso probar nuevas terapias que están en desarrollo, como los medicamentos que bloquean la vía del interferón.
En cambio, quienes no tengan esta firma en sangre podrían beneficiarse de un manejo más conservador, evitando medicamentos innecesarios. Esta personalización del tratamiento no solo mejora la eficacia, sino que también reduce efectos secundarios.
4. ¿Qué significa esto para ti como paciente?
Para las personas con esclerodermia, este hallazgo representa una esperanza concreta. No se trata de una cura aún, pero sí de una herramienta útil para anticiparse a los problemas y tomar decisiones con tiempo. Como siempre, el conocimiento es poder.
Habla con tu médico si te interesa saber más sobre este tipo de pruebas. Aunque todavía no están disponibles en todos los países, este tipo de avances se está expandiendo rápidamente y puede formar parte del cuidado en los próximos años.
Referencia
Este artículo se inspira en el estudio internacional publicado por Hinchcliff et al. en The Lancet Rheumatology, abril de 2025:"Serum interferon signature as a predictor of disease progression in diffuse cutaneous systemic sclerosis: a prospective multicenter cohort study."DOI: 10.1016/S2665-9913(24)00403-XMás información en: https://medicalxpress.com/news/2025-04-blood-biomarker-patients-severe-scleroderma.html
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